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Taxista VIP enfrenta prisión preventiva por violación agravada y robo a menor en Tegucigalpa
Tegucigalpa, Honduras – 27 de noviembre de 2025 – El Ministerio Público de Honduras dictó este jueves prisión preventiva contra Denis Roberto Bu Girón, un conductor de taxi VIP acusado de cometer violación agravada y robo con violencia o intimidación en perjuicio de una adolescente de 16 años. El caso, que ha generado alarma en la capital por los riesgos en el transporte por aplicaciones, se ventilará en una audiencia preliminar programada para el próximo 12 de diciembre a las 10:00 de la mañana.
El incidente ocurrió el domingo 16 de noviembre en Tegucigalpa, cuando la víctima, una menor de edad, solicitó un servicio de transporte a través de la aplicación INDRIVER. Según el expediente fiscal, la joven abordó la parte trasera de un vehículo Honda Fit de color blanco con placa HDJ 0975 –o HDT 0975 según algunas versiones–, conducido por el imputado, quien se identificaba falsamente como "Gerson" en la plataforma digital. Durante el trayecto, el conductor se desvió de la ruta indicada, lo que alertó a la pasajera. En lugar de dirigirse al destino, Bu Girón la llevó hacia una zona de construcción en el Anillo Periférico, donde la despojó de su teléfono celular, tarjetas de débito y otras pertenencias, para luego someterla a un abuso sexual agravado.
La captura de Bu Girón fue ejecutada por agentes de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) y la Fiscalía Especial de Protección a la Mujer (FEP-MUJER), en un operativo que involucró la revisión de evidencias como el registro del vehículo y testimonios de la víctima. "La usuaria agraviada solicitó el servicio mediante la aplicación 'INDRIVER', un servicio de transporte, cuando el usuario 'Gerson' de proveer la asistencia Denis Roberto", detalla el informe oficial del Ministerio Público, que resalta la colaboración de la ATIC en la recolección de pruebas. La menor, cuya identidad se mantiene en reserva como testigo protegido, presentó secuelas emocionales graves, incluyendo estrés postraumático, según fuentes cercanas al caso.
El Juzgado de Letras Penal de Tegucigalpa formalizó la detención judicial este 27 de noviembre, durante una audiencia inicial donde se presentó el requerimiento fiscal. La portavoz del Poder Judicial, Bárbara Castillo, confirmó que el tribunal evaluará las pruebas en la próxima fase procesal, con énfasis en la agravante por la edad de la víctima y el uso de violencia. "Se hizo el hallazgo de pertenencias de la víctima, además de un allanamiento donde se ejecutó un levantamiento", añadió el MP en su comunicado oficial.
Este suceso no es aislado en un contexto donde las denuncias por abusos en servicios de transporte por apps han aumentado en Honduras. En los últimos meses, al menos tres casos similares han sido reportados en Tegucigalpa y San Pedro Sula, involucrando desvíos de ruta y robos con connotación sexual. Organizaciones como el Observatorio de Violencia de Género han exigido mayor regulación a plataformas como INDRIVER, incluyendo verificación obligatoria de identidades y GPS en tiempo real. "Es imperativo que las empresas tecnológicas asuman responsabilidad compartida en la seguridad de las usuarias", declaró una representante de la Fiscalía de la Mujer en un informe reciente.
En redes sociales, el caso ha generado indignación. Usuarios en X (anteriormente Twitter) han compartido detalles del arresto, destacando la falsa identidad del conductor y llamando a la precaución en el uso de apps de movilidad. "Dictan detención judicial a conductor de taxi VIP por abuso sexual a usuaria", tuiteó EDN TV, sumando decenas de interacciones. Otro post de HCH Televisión Digital relató el trayecto del crimen: "El detenido llegó a recoger a la fémina en un vehículo Honda Fit... y en una obra de construcción abusó de ella".
Mientras la víctima recibe atención psicológica y médica, el Ministerio Público reitera su compromiso con la protección de menores y mujeres. Bu Girón, de 30 años aproximadamente, permanece bajo custodia en el centro penal de Tamara, a la espera de que la justicia determine su responsabilidad. Este caso subraya la urgencia de medidas preventivas en el transporte urbano, en un país donde la violencia de género sigue siendo una pandemia silenciada.