En 2025, América Latina ha mostrado una inflación heterogénea, con la mayoría de los países manteniendo tasas positivas pero moderadas (entre 0% y 5% interanual), mientras que unos pocos han registrado deflación, es decir, una caída generalizada y sostenida en los precios de bienes y servicios. Según datos recientes del Índice de Precios al Consumidor (IPC), solo Costa Rica y Panamá terminaron septiembre de 2025 en terreno deflacionario interanual, con tasas de -1% y -0,3%, respectivamente. En meses previos, como agosto, se sumó El Salvador con -0,11%, y en julio, Nicaragua tuvo una deflación mensual de -0,09%. Esta deflación es inusual en la región, históricamente azotada por inflación alta, y se atribuye principalmente a factores globales como la caída en precios de combustibles y alimentos, junto con dinámicas locales como la apreciación monetaria o subsidios.
A continuación, presento un resumen en tabla de los países afectados en 2025, basado en datos interanuales más recientes (septiembre/agosto). Luego, detallo causas específicas y, finalmente, explico por qué una caída de precios no siempre es beneficiosa, con énfasis en sus riesgos económicos.
Resumen de Países con Deflación en 2025
País | Tasa Interanual (Septiembre 2025 o más reciente) | Meses Consecutivos de Deflación | Causas Principales (Resumidas) |
---|---|---|---|
Costa Rica | -1% (septiembre) | 5 meses | Apreciación del colón (27,4% vs. dólar), caída en combustibles y alimentos; deflación en transporte (-5,02%) y comunicaciones (-4,03%). |
Panamá | -0,3% (septiembre) | 12 meses | Bajada en transporte (-4,6%), comunicaciones (-3,6%) y salud (-2,4%); pese a alzas en alimentos. |
El Salvador | -0,11% (agosto) | 5 meses (hasta agosto) | Reducción de aranceles a alimentos importados y subsidios a combustibles. |
Nicaragua | -0,09% (mensual, julio) | Esporádico | Políticas macroeconómicas estables y baja demanda; inflación general baja (1,73% interanual en abril). |
Fuentes: Datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) de cada país, Banco Central de Costa Rica (BCCR) y reportes regionales. Nota: La deflación en Nicaragua es más puntual y no interanual sostenida; el país proyecta inflación baja (2-3%) para fin de año.
Detalles por País: Causas Específicas y Contexto Económico
- Costa Rica (-1% interanual en septiembre 2025) Costa Rica acumula cinco meses consecutivos de deflación, con una acumulada en los primeros nueve meses de -1,95%. Esta caída se debe principalmente a la apreciación del colón costarricense frente al dólar, que ha ganado un 27,4% desde septiembre de 2022 (de 694 a 504 colones por dólar), haciendo más baratos los bienes importados como combustibles y alimentos. Además, rubros clave en la canasta del IPC, como transporte (caída del 5,02% anual) y comunicaciones (4,03%), han contribuido significativamente, impulsados por precios internacionales bajos de energía y tecnología. Contexto: La economía crece alrededor del 3,5-3,6% en 2025, por encima del promedio regional, gracias a exportaciones manufactureras y turismo. Sin embargo, la deflación contrasta con picos previos (12,13% en 2022), y se espera un repunte gradual hacia el 1,8% en 2025 y 2,5% en 2026, según la OCDE. El Banco Central mantiene una tasa de política monetaria en 3,75%, con proyecciones de retorno al rango meta (2-4%). No hay señales de recesión, pero la demanda de bienes duraderos se contiene tras el boom postpandemia.
- Panamá (-0,3% interanual en septiembre 2025) Panamá lleva un año completo con IPC negativo, el caso más prolongado en la región. La deflación acumulada en los primeros cuatro meses fue de -0,4%, y la interanual de -0,7%, arrastrada por caídas en transporte (-4,6%), comunicaciones (-3,6%) y salud (-2,4%), sectores con alto peso en la canasta familiar. Aunque alimentos y bebidas no alcohólicas subieron 2,1%, y restaurantes/hoteles 1,7%, no compensaron las bajadas en importaciones energéticas y servicios. Factores globales, como precios bajos de combustibles, y la dolarización (que limita ajustes monetarios) agravan la tendencia. Contexto: El crecimiento económico es robusto (alrededor del 4-5%), impulsado por el Canal de Panamá y logística, pero la deflación refleja una corrección postpandemia. El INEC reporta que, pese a alzas en bebidas alcohólicas (3,7%) y educación (0,7%), la variación mensual de diciembre 2024 fue solo 0,2%. Se espera estabilización en 2025, con inflación anual proyectada en 1,3%.
- El Salvador (-0,11% interanual en agosto 2025) Aunque en septiembre subió a 0,3%, El Salvador tuvo cinco meses de deflación hasta agosto, la más leve de la región. Las causas clave son políticas gubernamentales: reducción de aranceles a alimentos importados y subsidios a combustibles, que amortiguan shocks externos como alzas en precios globales de energía. Esto ha mantenido los precios estables en rubros básicos, pese a una canasta familiar sensible a importaciones. Contexto: La economía crece por encima del 2,5%, con énfasis en remesas y bitcoin como moneda legal. Expertos del Consejo Monetario Centroamericano ven esto como estabilización postpandemia, no como riesgo de recesión.
- Nicaragua (deflación mensual esporádica, como -0,09% en julio) Nicaragua no ha tenido deflación interanual sostenida, pero registró caídas mensuales puntuales debido a políticas macroeconómicas estables y baja demanda agregada. La inflación interanual es baja (1,73% en abril), respaldada por remesas y exportaciones agrícolas, pero con riesgos de alza por tensiones geopolíticas. El Banco Central proyecta 2-3% para fin de 2025, con crecimiento del 3-4%. Contexto: El país evita deflación crónica gracias a reservas internacionales y deslizamiento controlado del córdoba (5% anual en 2025), pero enfrenta desafíos como caída en inversión extranjera (-25% en primer semestre).
Por Qué una Caída de Precios No Siempre Es Tan Buena Como Parece: Riesgos y Consecuencias
A primera vista, la deflación parece un alivio para los consumidores, ya que aumenta el poder adquisitivo (se compra más con el mismo dinero). En el corto plazo, como en estos países de América Latina, beneficia a hogares al abaratar combustibles y alimentos, especialmente en economías en crecimiento. Sin embargo, los economistas advierten que no es un objetivo deseable y puede volverse perjudicial si se prolonga, generando un círculo vicioso deflacionista. El rango ideal de inflación es del 2-4% anual, que estimula el consumo sin erosionar el ahorro.
Razones principales por las que la deflación es problemática:
- Retraso en el consumo y la inversión: Los consumidores y empresas postergan compras esperando precios aún más bajos, lo que reduce la demanda agregada. Esto lleva a menos producción, quiebras y despidos. En Costa Rica y Panamá, por ejemplo, la demanda de bienes duraderos ya se contiene, según el BCCR.
- Aumento del peso real de la deuda: Con precios cayendo, el valor del dinero sube, haciendo que deudas fijas (hipotecas, préstamos) sean más difíciles de pagar. En economías dolarizadas como Panamá, esto agrava el problema, ya que no hay devaluación para aliviarlo.
- Estancamiento salarial y empleo: Reduce presiones para alzas salariales, limitando ingresos familiares. Puede causar recesión, como en la "década perdida" de Japón (años 90), con deflación crónica que provocó bajo crecimiento (1% anual), altos préstamos morosos y envejecimiento poblacional que fomenta ahorro sobre gasto.
- Dificultades para la política monetaria: Bancos centrales bajan tasas de interés (hasta cero), pero no estimulan la economía si la gente ahorra más. En América Latina, con historial de hiperinflación, la deflación temporal es "positiva" comparada con crisis pasadas, pero requiere monitoreo para evitar contagio regional.
Consecuencias potenciales en la región: Si persiste, podría desacelerar el PIB (proyectado en 2,2% para 2025 por CEPAL), aumentar desempleo (ya en 7-10% en algunos países) y erosionar confianza. En contextos como el de 2025, con guerra comercial EE.UU.-China y cambio climático afectando commodities, la deflación podría complicar la recuperación postpandemia. Expertos recomiendan políticas como subsidios focalizados o estímulos fiscales para equilibrar.